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Una crítica irónica al mercado del arte, dispuesto a comprar todo, a condición que sea firmado. Demuestra que la personalidad del autor es en grado de transformar en arte también sus rechazos biológicos. Mierda de artista de Piero Manzoni nos muestra 90 latas rellenas de mierda, aunque no parece ser cierto (El confidencial), es algo rompedor, que nos demuestra que en la época de la obra (1961) y ahora una firma del artista en una servilleta se vendía por millones.

1. El contenido de las latas es, como dice el título, auténtica mierda de artista. Piero Manzoni las enlató y las expuso en la Galleria Pescetto de Albisola Marina.
2. El lote de latas era de 90 piezas. Simulaba la importancia del número en el oro, haciendo una analogía crítica entre lo que podía valer una firma de un artista y el propio oro.
3. Se trata de una crítica, ácida y mordaz, del mercado del arte, donde la importancia de la firma de un artista conocido hace perder la cabeza en el tema económico. Así que él presentó sus propios excrementos, los firmó y los vendió, haciendo la burla a todo el mercadeo artístico riéndose de lo que eran capaces de hacer.

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