(1882 - 1971)
Su armonía politonal, sus ritmos abruptos y dislocados y su agresiva orquestación provocaron en el público uno de los mayores escándalos de la historia del arte de los sonidos. Autor de dos ballets que habían causado sensación, "El pájaro de fuego" y "Petrushka", el citado día de 1913 Stravinsky se confirmó como el jefe de filas de la nueva escuela musical. Sin embargo, él nunca se consideró un revolucionario; de manera similar a Picasso en el campo de las artes plásticas, el compositor se caracterizó siempre por transitar de un estilo a otro con absoluta facilidad. Alumno de Nikolai Rimski-Korsakov en San Petersburgo, la oportunidad de darse a conocer se la brindó el empresario Sergei Diaghilev, quien le encargó una partitura para ser estrenada por su compañía, los Ballets Rusos. Su rápida evolución culminó en la "Consagración de la primavera" y en otra partitura destinada al ballet,"Las bodas", instrumentada para la original combinación de cuatro pianos y percusión, con participación vocal. En estas obras el músico llevó al límite la herencia de la escuela nacionalista rusa hasta prácticamente agotarla. Su estilo experimentó entonces un giro que desconcertó a sus propios seguidores: en lugar de seguir el camino abierto por estas obras, en 1920 dio a conocer un nuevo ballet, "Pulcinella", recreación de la música barroca a partir de composiciones de Giovanni Battista Pergolesi.Comenzaba así la etapa neoclásica, caracterizada por la revisitación de los lenguajes del pasado, con homenajes a sus compositores más admirados, como: Bach , Tchaikovsky, Haendel, Haydn o Mozart. Con la "Sinfonía en tres movimientos" y la ópera "La carrera del libertino" concluye esta etapa, tras la cual Stravinsky volvió a sorprender al adoptar el método dodecafónico. Fallecido en Estados Unidos, sus restos mortales fueron inhumados en Venecia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario